Secuenciación de los conflictos ideológicos y de las disputas programáticas entre las diversas corrientes artísticas, hasta la primera exposición impresionista (1822-1874)

Luis Aurelio Gonzalez Prieto y María del Mar Díaz González

Vista en retrospectiva, la citada muestra está considerada como uno de los hitos fundamentales de la historia del arte occidental. Previamente a su celebración, este logro desencadenó muchas disputas entre los jóvenes artistas más innovadores y los maestros académicos. El tesón de los rebeldes se mantuvo incólume y fue ejemplar, hasta materializar un evento independiente en 1874, detonante asimismo de la desinstutionalización del célebre Salon de Paris. Durante las más de cinco décadas, el Neoclasicismo defendido por la academia, como único estilo imperante reinaba en las muestras oficiales y se impuso sobre el Romanticismo, el realismo y finalmente el Impresionismo. Algunas exhibiciones, colgadas en los Salons des Refusés, sin continuidad en verdad, acogieron los numerosos rehusados (Delacroix, Courbet, Manet, Renoir, Cézanne o Monet, entre otros muchísimos artistas). A partir de las fuentes historiográficas inéditas, la crítica de la prensa histórica gala especializada y los catálogos de las exposiciones se ha profundizado este complejo panorama artístico complejo e intrincado, salpicado de grandes confrontaciones no sólo estéticas, sino también políticas.